Descripción
El bidón hidrocarburos homologado norma UN es un contenedor diseñado específicamente para el almacenamiento y transporte seguro de sustancias líquidas inflamables, como combustibles y otros hidrocarburos.
Está fabricado con materiales de alta resistencia y cumple con las regulaciones establecidas por la normativa UN para garantizar su adecuada manipulación y seguridad en el manejo de sustancias peligrosas.
Homologado según la norma “UN” obligatoria para el transporte de hidrocarburos.
Dispone de visor de nivel con escala para verificar la capacidad restante del bidón.
Recomendaciones de uso:
Almacenamiento adecuado: Guarde los bidones en un lugar fresco y bien ventilado, alejado de fuentes de calor o ignición.
Etiquetado claro: Identifique claramente el contenido del bidón mediante etiquetas legibles y específicas para evitar confusiones y accidentes.
Manipulación segura: Utilice equipos de protección personal al manipular los bidones y evite golpes o caídas que puedan dañar el contenedor o causar fugas.
No exceder la capacidad: Respete la capacidad máxima de carga del bidón, ya que un exceso de llenado puede provocar derrames y riesgos para la seguridad.
Inspecciones periódicas: Realice revisiones regulares para detectar posibles daños, desgastes o deterioros que puedan comprometer la integridad del bidón.
Recomendaciones de mantenimiento:
Limpieza adecuada: Antes de almacenar un nuevo contenido, asegúrese de limpiar el bidón de cualquier residuo anterior y séquelo completamente.
Reemplazo de piezas dañadas: Si nota cualquier daño, fisura o deterioro en el bidón, reemplace las piezas defectuosas o el bidón completo, según sea necesario.
Almacenamiento correcto: Cuando el bidón no esté en uso, guárdelo en un lugar protegido y alejado de la exposición prolongada a la luz solar o condiciones ambientales extremas.
Sectores industriales de aplicación:
Industria petrolera y de combustibles.
Transporte y logística de hidrocarburos.
Sector químico y petroquímico.
Industria automotriz y de maquinaria.
Minería y extracción de minerales.
Agricultura y agroindustria (para almacenar combustibles y productos químicos agrícolas).
Construcción y obras públicas.
Industria de generación de energía y plantas eléctricas.